Tampoco el sector de los cerrajeros está a salvo de esos individuos que ya no es que sean malos profesionales y causen estropicio allá donde van, es que aprovechan que los necesitas para intentar entrar en tu casa.
Saber que existen delincuentes que se hacen pasar por profesionales para robar no hace sentir vulnerables, pero hay medidas que puedes poner en marcha para evitar que algo desagradable suceda.
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Verifica antes
Si has encontrado su número en algún directorio o publicidad, busca el nombre de la empresa en internet y comprueba que tiene una página web medianamente seria, o incluso perfiles en redes sociales. En caso de que no, al menos pregunta de dónde vienen o dónde está su sede, ya que es preferible fiarse de los cerrajeros locales.
Lo anterior puede parecer muy obvio, pero cuando se está en una situación de emergencia se tienden a cometer errores de calado.
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La primera impresión cuenta
¿El profesional ha llegado en un vehículo serigrafiado con el logo o nombre de la compañía? ¿Lleva una indumentaria acorde? ¿Viene con un mínimo de herramientas para proceder? Si hay algo que te alerte, pon remedio y no te consueles pensando: “Seguro que no pasa nada”.
Es más, puedes pedir su identificación, como él debe pedírtela a ti. Un cerrajero profesional no le abre una puerta a cualquiera.
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Pregunta presupuesto
Esto es algo que debes hacer antes y no ya porque vayan a colarse en tu casa, sino porque cualquiera con poca ética puede aprovechar tu situación de emergencia y el hecho de que no hayas preguntado para cobrarte lo que le dé la gana.
Las tarifas pueden no estar recogidas en la web porque dependen de factores como el desplazamiento o la hora de actuación, pero puedes preguntar antes para que te dé un precio aproximado. Y si una vez en el sitio cree que va a ser más porque el tipo de cerradura tiene su complicación, debe avisarte antes de proceder.
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Pide factura
Además de tener un desglose de todo y datos de contacto para poder volver a contactar con la empresa, te servirá en caso de que el arreglo no haya dado el resultado esperado. Y es que los buenos cerrajeros ofrecen garantías.
En definitiva, lo que debe primar en estos casos es el sentido común, pero nadie está salvo de pecar de exceso de confianza. Lo ideal es que te hagas con un pequeño listado de cerrajeros para tenerlo a mano cuando lo necesites, y que lo confecciones después de preguntar a amigos y familiares.